"Sean los orientales tan ilustrados como valientes."- José Gervasio Artigas - año de 1815 - Cuando los orientales entraron en Montevideo en 1815 y se vieron en la necesidad de organizar un gobierno provisorio, Artigas pasó a ser el Gobernador y Capitán General demostrando su condición de estadista, llegando a su apogeo. Allí, sabiendo la gran importancia de la Educación, Artigas la priorizó, y el santo y seña del ejército de sus aguerridos hombres fue: "Sean los orientales tan ilustrados como valientes". Así creó una escuela de primeras letras en su campamento de Purificación e inauguró la primera Biblioteca Pública, al tiempo que el Cabildo de Montevideo reabría la escuela gratuita que había dejado de funcionar en 1812. El ideario artiguista es una quimera. Grandilocuentes panfletos, nos recitan a diestra y siniestra frases tan hechas como mentirosas: "Transparencia de la Gestión" "Eficiencia con Equidad" Subestimando nuestra comprensión lectora (del pueblo), como no podría ser de otra manera. Con humildad, no ofendo ni temo, es una frasecita que no aplica para los nuevos actores del nuevo Uruguay, valga la redundancia. Uno de los aspectos que más me aterra del nuevo Uruguay, y de sus actores y de sus escenarios, es que parecen haber olvidado el ideario de los maestros de antaño. Ellos deseaban fervientemente que cuando grandes, todos fuésemos hombres y mujeres ilustrados, en coherencia con el ideario artiguista. La palabra es el don más preciado, es lo mínimo con lo que una persona que de un modo u otro, ejercerá una fuerza para afectar un destino colectivo. Si nuestros maestros leyeran cómo escriben algunos adultos, que además están en lugares públicos, caerían fulminados por un paro cardíaco. A continuación, dos faltas graves que ratifican la poca importancia que tiene para muchos, el riquísimo Idioma Español, sus cadencias, hiatos, diptongos:
"gusto valor a los esfuerzos."En esta oración, Gusto se confundió con Justo. Lo cual es grave porque la jota y la ge, son consonantes que en algunas instancias suenan igual, pero en otras no, depende de la vocal que las sucede.
"nuestra Institución se a planteado."
Las haches que siempre son olvidadas. Bueno, es una letra que no habla, y quizá esta sea la causa. Pero cuando dicha omisión implica modificar sustancialmente el concepto del vocablo, puesto que a, es una preposición, y ha, una conjugación de un verbo que refleja un tiempo pasado. Otros que siempre faltan con aviso son las tildes, y no quisiera verme tentada de justificar a quienes los dejan en el camino el hecho de que la computadora tiene teclado en inglés. Sean los orientales tan iletrados como...
